Nunca pensé que un papel pudiera
representar tan mal todos aquellos años de agonía que pasé , sin saber si lo
conseguiría, dejando de lado a familia y amigos , noches sin dormir... Para al
final conseguir un papel con mi nombre y un número, que a partir de entonces
conocería como mi valor para la sociedad.
No se si valió la pena , solo sé
que desde que prendí fuego al papel me siento mucho mejor.
Eva Civera
Comentarios
Publicar un comentario